1º Simposio Científico del Trineo de Viento: "Una oportunidad internacional"

1º Simposio Científico del Trineo de Viento: «Una oportunidad internacional»

El pasado 12 de junio tuvo lugar en Madrid, en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, tuvo lugar el 1º Simposio Científico del Trineo de Viento, que reunió a más de una veintena de científicos polares españoles e internacionales con 14 proyectos diferentes. Todos ellos han participado en expediciones en el Ártico y la Antártida con el eco-vehículo español, cero emisiones. En el evento, organizado por el proyecto Trineo de Viento, se recapitularon las conclusiones preliminares de todos los trabajos realizados, fundamentalmente en la última travesía Antártida Inexplorada 2018- 2019, pero también de otras anteriores. El objetivo era dar compartir experiencias y analizar en común las perspectivas de cara a la demanda futura de esta plataforma.

Cada uno de los equipos hizo una presentación de sus trabajos de entre 15 y 20 minutos en las que pusieron de manifiesto los logros y las dificultades que se han encontrado con la plataforma móvil. Las intervenciones de los investigadores extranjeros -Jason Box, Ross Edwards y Paul Travis Vallelonga- se realizaron mediante vídeos en los que explicaron sus participación. Con todo ello se prepara una publicación.

Si algo quedó de manifiesto en la jornada fue la gran diversidad de proyectos científicos que puede llevar a bordo el Trineo de Viento por el interior de la Antártida y el Ártico, incluyendo Biología, Espacio, Geología, Meteorología, Tecnología, etcétera. De hecho, algunos de los dispositivos diseñados para el vehículo podrían ser patentados dadas sus prestaciones, probadas con éxito en condiciones extremas.

Fue en el momento de las conclusiones cuando se pusieron sobre la mesa los principales retos a los que se enfrenta el Trineo de Viento de ahora en adelante. También la oportunidad que supone para la ciencia polar nacional poder posicionarse con algo tan innovador en el panorama internacional. De hecho, como recordó su creador, Ramón Larramendi, ya ha habido algunas publicaciones científicas en torno a los datos recabados en el pasado y también ha sido mencionado en la revista Nature , en un artículo donde se mencionaban diferentes alternativas para el desarrollo de una ciencia libre de emisiones contaminantes: “Sustantibility a greener culture” . Larramendi puso de manifiesto el interés mostrado por el  ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, para que se analice  la incorporación del  Trineo de Viento al sistema científico español, algo actuamente en estudio en un grupo de trabajo.

Entre las conclusiones principales del simposio (a falta de resultados científicos que tardarán en publicarse) destacan:

LOS RETOS 

  • Respecto a los tiempos, se puede esperar a que la comunidad científica plantee la necesidad de trabajar en ciertas áreas polares o, por el contrario, ofrecer ya  esta estructura . Hay científicos que defienden que si se tiene disponible se utilizará, sobre todo porque es una innovación para la ciencia española muy importante, al abrir nuevos territorios de exploración, después de 30 años en la Antártida.
  • Algunos científicos defienden que no hace falta estar en todos los lados y que la ciencia española ahora no tiene capacidad suficiente para abarcar demasiado .  Se argumenta que el presupuesto con el que cuenta la ciencia polar es ya muy ajustado para intentar incorporar una nueva estructura científica como es el Trineo de Viento, dado que si no hay un aumento de fondos para poner en marcha una estructura mínima de funcionamiento tendría que restarlos de otro lado.
  • Hay aún muchas mejoras que hacer como vehículo científico en el Trineo de Viento en cuanto al cumplimiento y seguimiento de los protocolos científicos para que los datos recogidos en el terreno permitan tener resultados científicos de calidad. Los problemas surgidos en la última expedición por parte de algunos presentes se relaciona con el hecho de que en estos momentos no hay ni una sola persona dedicada al 100% a formarse y trabajar en el Trineo de Viento, dado que ello requiere un presupuesto.
  • Se detecta la necesidad de estandarizar protocolos y profesionalizar a la tripulación en tareas científicas.
  • Se han detectado problemas en el suministro energético de proyectos científicos que habría que solucionar de cara a la apuesta definitiva por el eco-vehículo, con objeto de sacar el máximo rendimiento científico posible. Con más inversión y planificación, estos problemas se podrían solventar.
  • El Trineo de Viento se enfrenta al reto de superar las trabas administrativas que impone la burocracia actual del sistema científico, que es muy complejo y que, si bien desde las más altas instancias del Ministerio se tratan de solucionar, no es fácil debido a que depende de otros organismos públicos. Se buscan fórmulas para encajar el proyecto en el sistema público.

LAS OPCIONES DE FUTURO:

  • Desde instancias oficiales se considera fundamental evaluar el grado de demanda que hay en  la comunidad científica de esta infraestructura para determinar el número de equipos interesados, el número de proyectos, su continuidad a lo largo del tiempo, etcétera. En función de esta demanda, se tomará la decisión de incorporarlo como estructura polar móvil española sin que afecte a otras ya en marcha. De momento, la demanda ha sido excelente, dado que han participado 10 proyectos en la última expedición.
  • Para muchos de los presentes, el Trineo de Viento tiene un gran valor para la ciencia nacional. Se valora muy positivamente el «prestigio internacional» que puede suponer ofrecer a la comunidad científica mundial una plataforma como ésta, con cero impacto ambiental.
  • En relación con los datos conseguidos en a Antártida Inexplorada, algunos de los presentes concluyen que el ratio calidad/precio del trabajo realizado con el eco-vehículo polar es excelente, dado el coste que supone acceder hasta los 80º Sur para recabar datos útiles para la ciencia con otras alternativas.
  • De cara a la mencionada cooperación internacional, se menciona la posibilidad de que en el futuro el Trineo de Viento funcione como una nave espacial en la que diferentes proyectos pagan una cantidad por llevar ‘carga útil’ a bordo en una expedición polar.
  • Se plantea la posibilidad de hacer convocatorias oficiales nacionales e internacionales a las que puedan apuntarse proyectos diferentes y cada proyecto aporta fondos para expediciones y una estructura básica de funcionamiento del proyecto Trineo de Viento.
  • Un modelo de gestión que se plantea es que el Trineo de Viento realice una expedición cada tres o cuatro años (podrían ser anuales, según la demanda), planificada con tiempo para no arriesgar todos los fondos de un proyecto a una expedición.
  • Se confirma que el ministro de Ciencia, Pedro Duque, tiene mucho interés en que salga adelante el Trineo de Viento.
  • Se plantea alternativa privada: que Ramón Larramendi cree una empresa que ofrezca como servicio privado el Trineo de Viento, de forma que las instituciones o proyectos lo contraten para expediciones como medio de transporte por el interior antártico y ártico.
  • Se plantea buscar colaboraciones fijas oficiales con instituciones como la ESA.
  • Se concluye que las expediciones realizadas, y en especial la última, han demostrado que es viable como plataforma científica.